E
l inédito polímero, un tipo de plástico, rellena auto-
máticamente agujeros de 3 cm de ancho, 100 veces
más grandes de lo que se había conseguido con an-
terioridad. Con un diseño inspirado en el sistema de coa-
gulación de la sangre, contiene una red de capilares que
envía químicos reparadores hacia las áreas dañadas.
El nuevo material, creado por ingenieros de la Universi-
dad de Illinois, Estados Unidos, se describe en un estudio
publicado en la revista Science.
Los científicos llevan soñando muchos años con plásticos
que se “curen” solos tal como lo hace la piel humana. Así po-
drían sellarse las rajaduras de los caños de agua o del capó de
un auto. Incluso los satélites podrían repararse a sí mismos. Y
los chips electrónicos rotos de computadoras portátiles y te-
léfonos móviles podrían resolver sus problemas en forma es-
pontánea y autónoma. Uno de los primeros avances se con-
siguió en 2001 en la misma universidad, cuando Scott Whi-
te y sus colegas llenaron un polímero con cápsulas micros-
cópicas de un agente reparador líquido. Cuando el material
se rompía, se liberaban los químicos y llenaban los huecos.
Como las venas humanas
Más recientemente, se han desarrollado cubiertas im-
permeables, hormigón e incluso circuitos eléctricos con
propiedades de auto reparación. Pero incluso los mejores
plásticos auto reparadores y polímeros sólo pueden arre-
glar daños a escala pequeña, tal como apuntan los autores
del nuevo trabajo. “Aunque se ha demostrado la auto re-
paración de defectos microscópicos, la regeneración de
material perdido a causa de daños catastróficos requiere
un enfoque regenerativo”, dijo White. Para arreglar gran-
des roturas, él y su equipo diseñaron un nuevo sistema
vascular inspirado en las arterias y venas del cuerpo huma-
no. Una red de canales envía un agente reparador al sitio del
daño. Los químicos llegan a través de dos vías separadas y
se combinan para sellar el agujero en una reacción en dos
etapas. Inicialmente forman una especie de armazón de gel
a través del hueco, y luego el gel se endurece para formar
una estructura sólida. “Llenamos zonas de más de 35 mm
en menos de 20 minutos, y restauramos funciones mecáni-
cas en menos de tres horas”, escribieron los investigado-
res en Science. Las pruebas mostraron que el material re-
cuperó alrededor del 62% de su fuerza original.
El nuevo plástico abre el camino para futuros polímeros
que puedan recuperarse de impactos de balas, bombas o
cohetes. Y aunque otros ingenieros elogiaron la innova-
dora inspiración de este diseño, los científicos admiten
que los futuros materiales verdaderamente regenerativos
requerirán un sistema de reparación mucho más flexible.
“Cuando el daño es impredecible e incontrolado, serán
necesarias redes vasculares más complejas e interconecta-
das para proveer suficiente cobertura vascular y duplica-
ción para rodear el bloqueo de los canales”, explicaron los
investigadores en su trabajo. Zhouzhou Zhao y Ellen Arru-
da, ingenieros de la Universidad de Michigan, comentaron
en Science sobre este trabajo que aunque los avances en
este campo son estimulantes, “el desempeño a largo plazo
de polímeros que se han reparado de forma autónoma aún
no se ha examinado”.
"También se necesitan métodos para evaluar y vigilar la
habilidad reparadora potencial después de múltiples
eventos de reparación".
“Aquí de nuevo”, escriben los ingenieros, “ejemplos
elegantes que han evolucionado en la naturaleza pueden
inspirar soluciones”.
Fuente: James Morgan, Redacción de BBC Mundo
JAMES MORGAN
Una pantalla de teléfono móvil que al romperse se repara sola.
Este es el tipo de “milagro” que propone el un nuevo material capaz de regenerarse
imitando la forma en que se coagula la sangre en una herida
.
MARZO - MAYO 2014 /
Plásticos Nº 310 / 25
NUEVO PLÁSTICO
Se regenera imitando la coagulación de la sangre
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